Hace diez años y ocho meses(SEPTIEMBRE 2014), conocí a Yago, un labrador negro que se convirtió en mi compañero fiel, protector y mejor amigo. Yo era solo una niña, y él fue mi sombra y mi consuelo durante muchos años. Luego, hace cuatro años, llegó Bruno, un Braco de Weimar que enfrentó varias dificultades de salud, pero con amor y cuidados, hoy está sano y feliz, llenando nuestros días de alegría.

El 4 de junio 2025, Yago cruzó el arcoíris, dejándonos un vacío enorme… pero también una vida llena de recuerdos hermosos.

De ahí nace Huellas Yacco: un nombre que une la "Ya" de Yago y el "cco" de Braco. Es una mezcla de los dos perros que marcaron mi vida, y es mi forma de rendirles homenaje a través de esta tienda tan especial, pensada con amor para todas las mascotas y sus humanos.

Aquí celebramos el amor, la lealtad y la huella imborrable que dejan en nuestros corazones. 💛